miércoles, enero 19, 2011

C'est l'amour qui retient dans ses chaînes

Le había parecido ver una chispa de alegría en los ojos del hombre al alzar sus ojos, pero había durado apenas un instante. Las convenciones sociales habían vuelto a dominar la escena enseguida, haciendo que intercambiaran vanas frases cordiales, antes de que el hombre se despidiera con amabilidad. Ella había quedado mirando un segundo su marcha, antes de volver hacia el grupo de sus amigas (que seguro estaban cuchicheando sobre su descarada actitud). Sentía que algo había quedado pendiente, algo no estaba bien.

Nunca supo qué le hizo decidirse, en qué estaba pensando en ese momento, qué instinto o sentimiento le hicieron comportarse cómo lo hizo. Más tarde, en el internado, mientras recordaba lo sucedido como en una nube, tuvo que admitirse a sí misma que fue esa sensación de vacío, de falta de plenitud en el momento, lo que la llevó a darse la vuelta, echar a correr hacia el hombre, y al llegar a su altura, levantarse ligeramente sobre sus pies para dejar un rápido beso en los labios del sorprendido hombre, dejándolo desconcertado mientras la veía regresar corriendo de nuevo, las mejillas arreboladas no sabía si por la carrera o por los sentimientos, hacia el grupo de muchachas con el que desapareció de la vista.

1 comentario:

Candas dijo...

Bonito beso, si señor!!